Comprar

<p>El software comprado, también conocido como software on-premises, implica un coste de adquisición único, lo que permite al comprador poseer la licencia del software indefinidamente. Este enfoque ofrece varias ventajas, incluido el control total sobre el entorno de software, las capacidades de personalización y los costes potencialmente más bajos a largo plazo para las organizaciones que no necesitan actualizaciones periódicas o soporte. También proporciona un mayor nivel de seguridad y privacidad, ya que el software se ejecuta en la propia infraestructura de la organización, lo que reduce la dependencia de centros de datos externos y los riesgos asociados a la transmisión de datos a través de Internet.</p><p>Sin embargo, la inversión inicial en software puede ser significativa, incluidos los costes de hardware, instalación y mantenimiento. Las organizaciones también deben asignar recursos para gestionar el software, incluido el personal de TI para actualizaciones, parches y resolución de problemas. Con el tiempo, el software adquirido puede quedar obsoleto y carecer de las últimas funciones y mejoras disponibles en versiones más recientes u ofertas SaaS. Esto puede dar lugar a problemas de compatibilidad con el nuevo hardware o software, lo que puede requerir costosas actualizaciones o sustituciones. La flexibilidad también es limitada en comparación con las soluciones SaaS, que ofrecen fácil escalabilidad y acceso desde cualquier lugar, lo que dificulta a las organizaciones adaptarse rápidamente a las cambiantes necesidades empresariales.</p>